Héctor Castro Aranda, texto y fotografía | La Concha Acústica recibió a Los Caifanes el 23 de junio, un espacio en el que no tocaban desde 2015 y espacio que fue su casa desde finales de 1980 y principios de 1990. La Concha Acústica vivió una decena de vivencias de conciertos repletos, portazos y mucha cerveza, y así sucedió en esta ocasión, donde la nostalgia se apoderó de aquellos tiempos donde los lugares eran insuficientes por capacidad, donde las personas se quedaban fuera y donde el caos retando a la seguridad era el pan de cada día. Caifanes es Caifanes y llenan cualquier lugar donde se les presente, ya sea gratis o con boleto pagado.
La segunda edición del festival ConchaChela reunió a más de 10 mil personas dentro de la Concha y cerca de más de mil personas quedaron fuera del lugar, con la esperanza de poder disfrutar de sus ídolos, pero el sueño terminó y el lugar fue insuficiente. En esta edición, a comparación de la inaugural con el TRI, ahora no se contó con distintas casas cerveceras, lo que fue un atractivo el año pasado.
Caifanes salieron a escena a las 9:30 de la noche, con el poderoso tema «Negro Cósmico». Saúl Hernández, Alfonso André y Diego Herrera, los miembros fundadores, se veían felices y enérgicos, tal vez el lugar les recordaba viejas andanzas, grandes momentos. Un espectáculo gratificante que no se les veía a Caifanes en Guadalajara en pasadas visitas. «Para que no digas», «Miedo», «Nubes», «Viento», los primeros temas que marcarían una velada mágica donde la lluvia parecía amenazar su gran llegada. El sonido de la presentación de Caifanes fue sublime, se podía sentir el bajo y los golpeteos de la batería de André por todo el lugar, rodeado de altos árboles y palmeras en lo que alguna vez fue el lugar obligado para presentaciones nacionales e internacionales en Guadalajara. «Afuera», «Perdí mi ojo de venado», «Aviéntame», «Afuera», «La célula que explota» y cerrar con «La negra Tomasa». En un total de 21 clásicos temas, fue una noche que quedará para la historia en las presentaciones de Caifanes en la ciudad.