Héctor Castro Aranda | Con una trayectoria de más de 10 años, el trío de La Mirada, California, The Aquadolls, han escalado sabiamente en los peldaños de la industria de la música y nos presentan ese sonido muy del sur de California que nos remonta a la era de oro del rock alternativo de finales de los 1990, pero con un frescor apto para la generación Z o milenial. Han lanzado tres materiales de estudio: «Charmed», el más reciente, que salió hace apenas unas semanas. El trío liderado por Melissa Brooks ha compartido escenario con Kate Nash, Jimmy Eat World, Pennywise y ha actuado en festivales de la talla de Lollapalooza, Austin City Limits y Warped Tour. Además, han participado en el Ohana Festival de Eddie Vedder. La banda con sede en Los Ángeles pasó el verano de 2022 de gira con Incubus y Sublime con Rome. El 15 de septiembre tendrán una presentación espectacular en el Riot Fest en Chicago, en el Douglas Park, donde Revista101.com estará haciendo cobertura. Además, Revista101.com charló con Jacqueline Celeste Proctor, Keilah Nina y Melissa Brooks de The Aquadolls.
—Nos encontramos de gira y estamos promocionando, Charmed, nuestro más reciente material. Pero algo que siempre hacemos es escribir canciones y practicar una y otra vez.
—¿Cómo ha sido la sensación de estar en grandes festivales como Ohana y Beach Life?
—Estar en diferentes festivales durante las giras es algo que disfrutamos mucho, aparte de que nos divertimos. Pudimos compartir el escenario con algunos de nuestros artistas favoritos y uno de los aspectos destacados fue conocer a Mark McGrath de Sugar Ray. Especialmente después de, ya sabes, un año y medio, casi dos años de lidiar con Covid y pensar que no podríamos tocar en vivo nunca más o sin saber realmente lo que significaba para el futuro de la música. Fue realmente una gran experiencia poder participar en esos festivales y ver a todos juntos en persona bailando y cantando con nosotros. Definitivamente es mágico poder tocar en persona para multitudes tan grandes. Otro espectáculo que disfrutamos fue en Chicago, en el Teatro Metro, donde compartimos el escenario con Jimmy Eat World y dicho show se agotó. Luego regresamos y tuvimos todos estos locos festivales para tocar, ya que hacemos muchos shows en clubes y no son tan gigantes como Lollapalooza en el cual también estuvimos, por ejemplo.
—¿Cómo fue trabajar con Jimmy Eat World?
—Fueron muy amables con nosotros, fueron muy pacientes y respetuosos cuando teníamos que hacer nuestro trabajo previo en el escenario. Son muy agradables y en la sala donde están los camerinos compartimos espacio y pudimos hablar con ellos, nos agradecieron por tocar con ellos, nos trataron como si fuéramos una agrupación legendaria. El concierto fue una locura, porque el público que iba por ellos nos acogió bien y nos brindó una gran energía, fue un espectáculo perfecto.
—¿Cuáles son sus artistas favoritos?
—Dave Grohl y Foo Fighters, Patti Smith, ella más que una músico es una poeta, encapsula todo lo que amamos y todo lo que desencadenó su movimiento. Es difícil escoger solo uno. También Gwen Stefani. Incluso la vimos cuando estábamos en cuarto grado. Nos encanta que salte entre el hip hop, el rock and roll y la música pop. Nos gusta su eclecticidad musical, también por eso nos agrada Charlie XX y es algo que se refleja en Aquadolls.
—¿Qué opinan de la industria de la música en el Sur de California?
—Es enorme, el sur de California es tan grande que no importa el tipo de música que quieras escuchar o ver, encontrarás de todo aquí. Hay demasiadas subculturas, eso nos gusta. Pero también es muy competitivo. Mucha gente se muda aquí para hacer música y escalar en la industria. Así que todo el tiempo hay competencia, hemos visto tantas bandas entrar y salir. No solo compites con los lugareños sino con personas de otros lugares, pero es una escena hermosa. Nos agrada la cantidad de comunidad que hay aquí y sí existe mucha ayuda mutua. Así que ves muchos lazos familiares entre las diferentes agrupaciones y todo el mundo se conoce.
—¿Les gustaría tocar en México?
—Es uno de nuestros sueños, es un gran público y además el abuelo de Melissa Brooks (vocalista) es de Guadalajara. Sería genial tener una gira por México. Sé que cuando tocamos en El Paso, Texas, tuvimos varios seguidores que venían de Ciudad Juárez a vernos. También queremos tocar en Tijuana, donde sé que pasaron grandes cosas con bandas como Jane’s Addiction o Nirvana.
—¿Qué piensan de tocar en el Riot Fest?
—Riot Fest es un festival que encaja muy bien con lo que escuchamos y nos gusta, es como un sueño poder tocar ahí. Es un evento enorme donde el punk es el corazón del festival, será una locura total.