Construido por la Pennsylvania Railroad y gestionado por Ellsworth Statler, el hotel fue diseñado por William Symmes Richardson de la firma McKim, Mead & White. Desde su apertura en 1919, el Hotel Pennsylvania, ubicado en el número 401 de la séptima avenida en Manhattan, frente a la estación Pennsylvania Station y el Madison Square Garden, se convirtió en el hotel más grande del mundo. Aunque mantuvo su estatus como el cuarto más grande de la ciudad de Nueva York hasta su cierre permanente el 1 de abril de 2020, después de 103 años de funcionamiento.
Con 2,200 habitaciones distribuidas en 22 pisos, el Hotel Pennsylvania se convirtió en un símbolo de la ciudad de Nueva York por varios motivos: fue el primer edificio en tener una línea telefónica (el 212-736-5000) y fue el escenario para músicos y escritores, como en la famosa canción de Glenn Miller «Pennsylvania 6-5000» (de 1940), o en el ensayo de E. B. White «Esto es Nueva York» (1948).
Desafortunadamente, en años recientes, las mismas paredes que una vez albergaron a E. B. White se habían deteriorado, mostrando manchas de humedad y pintura vieja. También surgieron informes en Google sobre avistamientos de cucarachas en las habitaciones, a pesar del reconocimiento de la buena ubicación del hotel y la atención de su personal. El edificio de estilo beaux arts, fue un distintivo para los turistas de Nueva York, por su imponente diseño y tamaño. La decisión de demoler el Hotel Pennsylvania fue objeto de críticas por parte de organizaciones y residentes de Nueva York, quienes expresaron interés en conservar el histórico edificio.
Sin embargo, la demolición del Hotel Pennsylvania no se debe a problemas financieros o estéticos (era rentable en términos turísticos), sino que es parte del plan de la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, para «mejorar» el área de Penn Station, ubicada entre las avenidas Séptima y Octava y las calles 31 y 34, en Manhattan. El objetivo de la gobernadora Hochul es reemplazar los edificios de principios del siglo XX con modernas torres de oficinas de vidrio y metal, que ya son características del siglo XXI. Y el imponente edificio del Hotel Pennsylvania, ubicado en el 401 de la Séptima Avenida, no encaja con esa visión moderna, aunque sea accesible y bien ubicado para el turismo extranjero.
El proyecto de la nueva torre de vidrio y metal que se construirá en su lugar es propiedad de la firma Empire State Development Corporation, que presentó sus planes en una reunión, de los 259 oradores particulares, el 85% solicitó la modernización de Penn Station, su reubicación desde debajo del Madison Square Garden y la renovación del hotel en lugar de su demolición. Un monumento de la era dorada de la ciudad de Nueva York, ya no existe actualmente y ha sido totalmente demolida. Un ejemplo que no pasa esto solamente en la ciudad de Guadalajara, donde la mayoría de su Centro Histórico ha sido demolido o dejado a las suerte del abandono, inclusive en tiempos recientes en plena colonia Americana siguen sucediendo estos actos atroces.