Antonio Vivaldi, el prolífico compositor veneciano conocido principalmente por sus conciertos y obras instrumentales, también dejó una huella significativa en la música sacra. Entre sus composiciones religiosas, el Magnificat en sol menor, RV 610, destaca como una obra maestra que combina devoción profunda con la brillantez musical característica del Barroco.
Vivaldi, nacido en 1678, era un sacerdote católico y pasó gran parte de su carrera trabajando en el Ospedale della Pietà, un orfanato y conservatorio para niñas en Venecia. Fue allí donde escribió muchas de sus obras religiosas, incluyendo el Magnificat. Compuesto alrededor de 1715, el Magnificat en sol menor fue probablemente concebido para ser interpretado por las talentosas huérfanas del Ospedale, conocidas por su habilidad musical excepcional. El Magnificat de Vivaldi sigue la estructura tradicional del texto litúrgico del Cántico de María, tomado del Evangelio de Lucas (Lucas 1:46-55). Esta obra se divide en nueve movimientos.
La música de Vivaldi en el Magnificat es rica en contrastes dinámicos, texturas y colores, que reflejan la profundidad emocional y espiritual del texto. El uso de la polifonía y la homofonía alternadas, junto con la instrumentación barroca típica, crea un tapiz sonoro que es a la vez majestuoso y íntimo. Esta magnifica obra, será interpretada por La Orquesta de Cámara Higinio Ruvalcaba (OCHR) se ha consolidado como una de las agrupaciones más prestigiosas y dinámicas de México, llevando el nombre de su homónimo, un violinista y director emblemático en la historia musical del país. Fundada con el propósito de promover y difundir la música de cámara, la OCHR ha sido un farol de excelencia musical, contribuyendo significativamente al enriquecimiento del panorama cultural mexicano.
La orquesta fue fundada en el año 2001 como parte del Departamento de Música de la Universidad de Guadalajara. Lleva el nombre de Higinio Ruvalcaba, en honor al destacado músico jalisciense, cuya carrera como violinista y director de orquesta dejó una profunda huella en la música clásica mexicana. Ruvalcaba, nacido en 1905, fue un prodigioso violinista y compositor, cuyos esfuerzos por fomentar la música de cámara en México resonaron mucho más allá de su vida, inspirando a generaciones de músicos.
En su programa cinco de temporada, la Orquesta de Cámara Higinio Ruvalcaba de la Universidad de Guadalajara (OHIR) dedicará el repertorio a la música sacra, y bajo la batuta de Sergio Ramírez Cárdenas, interpretará Magnificat, una de las obras más emblemáticas en el catálogo religioso de Antonio Vivaldi.
La OHIR ejecutará la majestuosa obra coral acompañada del Ensamble Vocal Universitario del Departamento de Música del CUAAD, dirigido por Alejandro Zermeño; el Coro D’Arezzo, conducido por Carlos Gálvez y los solistas tapatíos Dolores González (soprano), Diana Medeles (mezzosoprano), Nicole Gálvez (contralto) y Jorge Pérez (tenor). Esta velada musical para elevar el espíritu abrirá con Dies Irae, del compositor jalisciense Manuel Cerda e incluirá dos piezas sacras de Georg Philipp Telemann y Mozart, así como “Las Naciones”, suite orquestal también de Telemann. Todo esto será ejecutado el próximo 15 de junio en la Sala 2 del Conjunto Santander. Boletos: 100 a 230 pesos. A la venta en taquillas y en conjuntosantander.com.