Issác Anaya, fotografía y texto | Desafiando las complicaciones del tráfico en Guadalajara, cientos de seguidores se congregaron en el escenario del C4 Concert House, que alrededor de las 19:00 horas ya comenzaba a llenarse de fanáticos. A lo largo de la tarde, la multitud fue creciendo.
Finalmente, Los Espíritus, fundados en 2010, comenzaron su actuación en el C4 Concert House como parte de su gira internacional «La Montaña», que también es el título de su más reciente álbum. La banda había visitado previamente otras importantes ciudades del país, como Monterrey y la Ciudad de México.Con un ritmo suave y casi onírico, Los Espíritus dieron inicio a su espectáculo con «Funeral», seguido de «Mares». Maxi Prieto, el vocalista, expresó su agradecimiento al público, lo cual fue recibido con entusiasmo por los presentes.
La banda agradeció sinceramente cada muestra de cariño del público. La banda agradeció sinceramente cada muestra de cariño del público. Adrián ContrerasContinuaron con «La mirada», seguida por el icónico canto de «Oe oe oe oe Espíritus». Las ovaciones fueron recibidas con gratitud por la banda, que se entregó por completo a su público con canciones como «La fuerza», «Jugo» y «En este mundo no hay lugar», todas coreadas por los asistentes.
Aunque el recinto no estaba completamente lleno, la atmósfera era cómoda y permitía moverse fácilmente para acceder a los baños, recargar bebidas espirituosas o cambiar de lugar. Desde cualquier punto, se podía apreciar perfectamente el show, que contaba con una pantalla de fondo y un juego de luces que sumergió al público en un sueño roquero-psicodélico-cumbianchero.
El grito de «Oe oe oe oe Espíritus» no se hizo esperar. El grito de «Oe oe oe oe Espíritus» no se hizo esperar. Adrián ContrerasLos Espíritus continuaron con «La Montaña», «El Viento», «Calles rotas», «Huracanes» y «Jesús rima con cruz». La banda solo hizo breves pausas para agradecer y sonreír con incredulidad ante el inmenso amor del público. En la recta final del concierto, los argentinos cerraron con «Navidad», «Ola blanca», «Las Cortinas», «Esa luz» y «Vamos a la luna». La respuesta emotiva del público fue inmediata, y cuando Los Espíritus dejaron el escenario, los asistentes comenzaron a gritar pidiendo otra canción.
Los Espíritus regresaron con una sonrisa de oreja a oreja, complaciendo a sus leales seguidores y a los nuevos fans con «Lo echaron del bar», acompañados por su invitado especial, Ronco. Concluyeron la noche con «Noches de Verano» y «La rueda que mueve al mundo», en una velada llena de rock, blues y psicodelia, culminando con un guiño a The Doors y su icónica «Roadhouse Blues». Sin duda, una noche inolvidable.