José Rodolfo Castro | Cuando se alineaba el encuentro Saúl «Canelo» Alvarez-Gennady «GGG» Golovkin, no pocos consideraron que no tenía caso arriesgar a la gallina de los huevos de oro. Esa noche, «Canelo» exhibió la calidad de un peleadorazo, la única vez desde que es campeón mundial. Se montó el desempate con «GGG» un año después, mucho tiempo, el considerable para tomar la decisión de reencontrarse en el lugar en el que el castigo suele dejar secuelas.
Y desde su debut en Las Vegas, como ahora, «Canelo» no tiene necesidad de arriesgar el físico, es un producto que se vende bien con peleitas, está comprobado el negocio en Estados Unidos. Cada uno de sus encuentros es la misma sinopsis.
Luego de que EL INFORMADOR encabezara, Jeque, dispuesto a pagar 200 MDD a Saúl Alvarez, consideramos que la información resultó en jugada ajedrecística, movimiento del caballo para jaque al jeque, Turki Alalshikh, presidente de la Autoridad General de Entretenimiento del Reino de Arabia Saudita, y podría ser jaque mate del boxeador jalisciense, con la firma del contrato, pero por más de 200 millones de dólares por enfrentar a Terence Crawford. Aún se diera el anuncio espectacular, «Canelo» haría el enroque, para continuar con la producción de su mina de oro.
Rafael «La Cobra» Mendoza se lo repetía al manager de Saúl Alvarez, a quien asesoraba, y al entrenador, su mejor esquina del mundo, que «el taquillero es el mandón». Al cerrar el trato la empresa Golden Boy Promotions para que el jalisciense enfrentara a Floyd Mayweather Jr., quien construyó el producto «Canelo», dijo que era poco lo que ganaría, ya que el tapatío vendería todo, taquilla, pago por ver, esquilmos, souvenirs, todo, «porque Mayweather Jr., no es taquillero». A Saúl, como a su mejor esquina del mundo, los sorprendieron.
Después de varias promociones de Oscar de la Hoya para hacer negocio con Alvarez, éste aprendió, y debió profundizar en el tema cuando escuchó en junio de 2016 la cantidad de millones de dólares que ganó De la Hoya por concepto de sus peleas, 316 millones de dólares, mientras quien se castigaba el físico en el ring, sólo había recibido 32 millones de dólares. Revista101.com
Imagen | The Zugzwang Blog