Héctor Castro Aranda, texto y fotografía | La paella es, sin duda, uno de los platos más emblemáticos de la gastronomía española. Originaria de la Comunidad Valenciana, esta delicia culinaria ha conquistado paladares en todo el mundo, convirtiéndose en símbolo de la riqueza cultural y culinaria de España.
La paella nació en las zonas rurales de Valencia, alrededor del siglo XVIII. Los agricultores y pastores cocinaban este plato al aire libre con ingredientes locales que tenían a mano: arroz, conejo, pollo, verduras frescas y, en ocasiones, caracoles. Preparado en una sartén amplia y poco profunda llamada «paellera» o «paella», este plato se fue consolidando como una comida ideal para compartir en familia o con amigos, especialmente en festividades y celebraciones.
La paella ha trascendido las fronteras de España y se ha adaptado a los gustos y tradiciones de otros países. En América Latina, por ejemplo, es común encontrar paellas que incluyen ingredientes locales como chorizo o ají.
La paella llegó a México a través de la influencia de los inmigrantes españoles, principalmente durante los siglos XIX y XX, cuando miles de españoles llegaron a tierras mexicanas buscando nuevas oportunidades y estabilidad. Estos migrantes trajeron consigo sus tradiciones culinarias, entre ellas la paella, que pronto comenzó a popularizarse en el país.
Los restaurantes españoles establecidos en México también jugaron un papel importante en popularizar la paella, que a menudo se servía en reuniones familiares y eventos especiales. Con el tiempo, la paella se convirtió en un plato apreciado y festivo que simboliza la unión y la convivencia en celebraciones mexicanas. Ahora, es común encontrar este platillo en menús de restaurantes de diferentes estilos, así como en festivales de comida española en todo el país y continuando con esta gastronomía cultural, el 19 de octubre se celebró el IV Festival de la Paella en Ajijic, en el Centro de la Cultura y las Artes de la Ribera, Ajijic Chapala. Desde tempranas horas, las paelleras comenzaron a surtirse de los distintos ingredientes para que los asistentes pudieran disfrutar de diversas paellas presentadas por los chefs Jaime García Castaños, Eduardo de la Torre, Carmen Rodríguez, Javier Jalomo y Juan Pablo Castañeda.
Susan, es una ciudadana británica, su familia vive en Chicago y tiene cuatro años viviendo en Ajijic. Ella comentó a Revista101.com, que este tipo de eventos gastronómicos son maravillosos ya que a ella le gusta mucho la paella.
Mientras las enormes paellas se cocinaban a la perfección, los comensales del festival, en su mayoría extranjeros, abrieron el apetito con tortilla española y licor de frambuesa producido por el organizador del evento, Paco Romero. Cerca de las tres de la tarde, uno mismo podía servirse de las distintas paellas ofrecidas, que provocaron una elevación de los sentidos con sus variados sabores, ingredientes y colores, y se disfrutaban con música en vivo durante todo el evento, incluyendo flamenco, jazz y son cubano. El evento fue todo un éxito, y le recomendamos que ponga en su radar la edición 2025.