
Con el primer tráiler y póster ya disponibles, 20th Century Studios revela un adelanto de Springsteen: Música de Ninguna Parte, una película profundamente introspectiva que lleva a la pantalla grande el complejo proceso detrás de Nebraska, el emblemático álbum de 1982 de Bruce Springsteen. Protagonizada por Jeremy Allen White en la piel de «El Jefe», esta biopic se estrena en cines el próximo octubre y promete ser uno de los retratos más íntimos y emocionales del icónico músico estadounidense.
Dirigida y escrita por Scott Cooper (Crazy Heart, Hostiles), la cinta está inspirada en el libro Deliver Me from Nowhere de Warren Zanes, quien también participa como productor ejecutivo. El filme se sumerge en una etapa crucial de la vida de Springsteen: un joven artista que, pese al éxito inminente tras el lanzamiento de The River, se ve enfrentado a sus propios demonios internos, luchando por encontrar sentido y autenticidad mientras graba de forma solitaria en su cuarto de Nueva Jersey un álbum que hoy es considerado una obra maestra cruda, austera y profundamente humana.
“Realizar esta película fue una experiencia transformadora”, expresó el director Scott Cooper, quien confesó haber admirado a Springsteen desde hace décadas. “Springsteen: Música de Ninguna Parte me permitió explorar la vulnerabilidad de un artista que eligió el camino menos fácil en busca de verdad, y lo hizo con una honestidad devastadora. Gracias a Bruce y a Jon Landau por confiar en mí para contar esta historia”.
La película cuenta con un reparto de alto calibre encabezado por Jeremy Allen White, reciente ganador del Emmy y el Globo de Oro por The Bear, quien se enfrenta al reto de encarnar al legendario Springsteen. Lo acompañan Jeremy Strong como Jon Landau, su manager y confidente; Paul Walter Hauser como el técnico de guitarras Mike Batlan; Stephen Graham como el padre de Bruce, Doug Springsteen; Odessa Young como Faye, un interés amoroso ficticio; Gaby Hoffmann como Adele, su madre; Marc Maron como el productor Chuck Plotkin y David Krumholtz como Al Teller, ejecutivo de Columbia Records.
El filme retrata cómo Nebraska, grabado en una sencilla grabadora de 4 pistas y sin mayores pretensiones de ser publicado, se convirtió en uno de los discos más influyentes del rock contemporáneo. Con letras sombrías, personajes derrotados y una mirada descarnada a la América profunda, el álbum fue un punto de quiebre que definió a un Bruce Springsteen introspectivo, vulnerable y poéticamente lúcido. Producida por Scott Cooper junto a Ellen Goldsmith-Vein, Eric Robinson y Scott Stuber, Springsteen: Música de Ninguna Parte llegará exclusivamente a las salas de cine en octubre, con una propuesta cinematográfica que no solo retrata a una leyenda del rock, sino también el valor de la honestidad artística y la lucha interna de un hombre en busca de su voz más auténtica.