José Rodolfo Castro | La revista Forbes publicó el listado en el que aparece el tapatío Saúl «Canelo» Alvarez, como el boxeador mejor pagado en 2023, con 110 millones de dólares, periodo que correspondió del 1 de mayo del 2022 al 1 de mayo del 2023. Para el siguiente ranking, sumarán los negocios del tapatío que arrojaron ante John Ryder en el Estadio Akron, y Jermell Charlo en T-Mobile Arena en Las Vegas, celebrados en mayo y septiembre, respectivamente.
Si bien ambas producciones no registraron los resultados esperados en pago por ver, considerados como fracasos por sus bajas ventas, «Canelo» debe mantenerse como la marca punta de lanza del boxeo actual, ha unificado al público que sigue atento sus exhibiciones, mientras un sector lo erige como uno de los mejores boxeadores de todos los tiempos, el otro grupo se quedó esperando la pelea consagratoria que ya no tendrá, así como nunca han aceptado que el jalisciense elija a sus adversarios.
La popularidad de la marca «Canelo» se mantendrá en 2024 con el rating que conocemos, aún se enfrente al otro Charlo, Jermall. El negocio crecerá si expone su integridad física frente a David Benavidez, pero a estas alturas de su carrera, ni al caso, no lo necesita, en lo boxístico nada representa, no es pelea consagratoria, y en lo económico ganaría enormes bolsas en mayo y septiembre, sin despeinarse, y luego a lo que sigue, colgar los guantes.
«Canelo» volvió popular a Bivol, y sin enfrentamiento también a David Benavidez. A ambos les urge tenerlo enfrente, quieren sacarse la lotería, comprobación que el mexicano es el taquillero, y el mandón. Nombres como los de Terence Crawford, Gervonta Davis, aún están lejos de acercarse a las bolsas que gana el fenómeno comercial, el que quiere la industria boxística, para la que los Devin Haney, Shakur Stevenson, Artur Beterbiev, por ejemplo, no entusiasman. Tyson Fury, el campeón mundial de peso completo CMB, se puso como meta superar a «Canelo» como el boxeador mejor pagado del siguiente calendario.
Dice una máxima que el boxeo es un negocio, lo demás es mero romanticismo. Revista101.com