Héctor Castro Aranda | La alineación de las Chivas de la década de 1980, la continúan recitando los aficionados en 2023. Recuerdan con puntualidad los nombres que conformaron aquel equipo del rebaño sagrado. Con el número 11, Ricardo “Snoopy” Pérez, platicó con Revista101.com
—¿Es cantera cien por ciento Chivas?
—Sí, claro, desde que tengo uso de razón le voy a las Chivas; llegué a la cantera, y jugué doce años profesional con el rebaño.
—¿Cuándo debuta en el profesionalismo?
—El 14 de mayo de 1975, Guadalajara-UNAM.
—¿Campeón con Chivas?
—No, nunca, fui dos veces subcampeón.
Ricardo «Snoopy» Pérez, Eduardo «Yayo» de la Torre, Samuel «Samy» Rivas
—¿Después de Chivas en cuáles clubes jugó?
—U de G , Irapuato y futbol de salón en Los Angeles, California.
—¿Qué se necesita para convertirse en ídolo de la afición de las Chivas?
—Que sean extracción del Rebaño Sagrado, con eso te llega el cariño y amor a la camiseta y creo que es importante no perder la esencia.
—¿Molestia cuando las Chivas andan dando tumbos?
—Me da coraje con las personas que influyen para que el equipo ande así; los jugadores son los menos culpables porque a ti te piden ( contratan), y todos quisieran jugar en Chivas, aunque no tengas ni esencia, ni cariño. Coraje por aquellos que los contratan, y estos no tienen identidad, aunque no quiera al equipo, pero que se identifiquen rápido con los colores, daría otro desenvolvimiento, así Chivas estaría en otras condiciones.
—¿Recuerda cuando pasó por el crisol para recibir el baño de fuego y consagrarse en ídolo de la afición de Chivas?
—Fue poco a poco, ser ídolo no se hace de la noche a la mañana; tuve que pasar por selecciones sub-17, menores de 20, de 23, y la grande, y aún así mantenerme como titular entre ocho y nueve años, y como a la mitad de la carrera, empezara la gente a decir “este jugador no se quiere ir del equipo, le da su vida”, lo manifesté con mis actuaciones, y después de que te das cuenta que la gente te idolatra, porque lo sentí, por las acciones de los aficionados, se siente algo indescriptible.
—¿Qué periodista lo señaló como ídolo?
—En mi tiempo, bueno, hay libros que dicen que “Zully”, Quirarte y yo. Me moría por los colores, y eso dio para que la gente lo dijera: “es un ídolo”. José Manuel Flores, Humberto Parra, Ignacio Matus, Carlos Trápaga, me catalogaron con esa etiqueta, pues en las entrevistas me preguntaban qué se sentía ser ídolo. “¡Ah caray!… ¿Ya soy ídolo?”, voy a poner un poquito más de atención para cuidar todos los aspectos que se necesitan para ser ídolo.
—¿Su mejor recuerdo como jugador de Chivas?
—Hay varios, el primero cuando debuté profesionalmente, tenía 16 años; cuando jugué con la casaca de la Selección Mexicana. Quizá la eliminación al América por 3-0 en el Azteca en la temporada 1982-1983.
—¿Algún recuerdo triste?
—No haber ido a un Mundial estado nominado nueve años, fue por el problema de mafia que existe en el futbol mexicano.
—¿Es egresado de la Universidad de Guadalajara?
—Sí, licenciado en Administración de Empresas.
—¿Cuándo inicia su carrera en el periodismo deportivo?
—En 1998, por invitación de Humberto Parra, después el licenciado Alfredo Arnold me invita a escribir en el diario Ocho Columnas, así empecé.
—¿El apodo de ‘Snoopy’ quién se lo puso y por qué?
—El “Nene” Zapiáin; llegando el primer día me dijo que parecía perrito, me quiso decir hush puppies, y se equivocó y me puso “Snoopy”, y me ayudó. Entonces Angel Fernández decía: “Una bella postal para ‘Snoopy’, lo acaban de bautizar en Guadalajara”. Revista101.com
Imagen | Agencias